El Dark Social se refiere al tráfico web que proviene de canales privados y es difícil de rastrear con herramientas de análisis tradicionales. Esto incluye interacciones en mensajería instantánea, correos electrónicos, foros privados y mensajes directos en redes sociales.
En el contexto del marketing B2B, entender el Dark social es crucial, ya que cuando un usuario comparte un enlace en un chat privado y otra persona lo abre, esa visita no se atribuye correctamente en Google Analytics, sino que aparece como "tráfico directo", lo que genera brechas en la medición del rendimiento de los contenidos.
El Dark Social representa una gran parte del tráfico web y del proceso de decisión de compra de los consumidores. Muchas recomendaciones y conversaciones sobre productos ocurren en espacios privados, lo que significa que las marcas pueden estar perdiendo información clave sobre cómo se comparten y descubren sus contenidos.
Además, este tráfico suele tener una alta intención de compra, ya que proviene de recomendaciones personales y no de publicidad directa.
El principal reto del Dark Social es que distorsiona los datos de atribución. Sin un seguimiento preciso, las marcas pueden subestimar el impacto real de sus estrategias de contenido y redes sociales.
Algunos efectos clave incluyen:
Aunque no se puede eliminar completamente la falta de visibilidad del Dark Social, existen estrategias para medir y aprovechar mejor este tráfico: